Cualia.es

Narrativa protestante

Hay una diferencia básica entre un protestante y un católico: para el primero, todo está predeterminado; el segundo, por contra, goza de libre albedrío, puede decidir, en cada momento, qué camino seguir. La libre decisión implica la posibilidad de pecar. La predeterminación, sin embargo, exime del castigo, libra de la responsabilidad, pueriliza…

Desde hace, al menos, trescientos años, todo lo que pensamos, todo lo que decimos se hace desde el discurso protestante, que vino a sustituir el católico. Olvidémonos de marxismos/leninismos, de neoliberales, de librepensadores, de tercera vía, de conservadores… Para entender la situación actual de la vieja Europa, para conocer la realidad oculta tras determinadas actitudes emanadas de la Unión Europea, hay que volver la vista a la ruptura producida hace cuatro siglos.

Hasta hace cuatro siglos, la culta cuenca mediterránea, mestiza y diversa a partes iguales, se había erigido en el tarro de las esencias occidentales: la democracia griega, el derecho romano, la religión judeocristiana. Hace cuatro siglos, con el triunfo de las doctrinas protestantes (cajón de sastre de puritanos, calvinistas, anabaptistas..), iniciamos una senda que nos ha traído hasta hoy. Hasta una sociedad donde no tiene cabida el sentimiento, sólo la razón. Una sociedad infantilizada, pues no recae sobre ella el peso de la responsabilidad. Una sociedad que cierra sus puertas «al otro», al diferente, al que no es como él. Porque él ha nacido elegido. Porque el otro ha nacido condenado. Sin más.

Una narrativa protestante que ha sabido adaptarse al devenir de los tiempos. Una narrativa protestante que se ha hecho laica, políticamente correcta, apta para todos los paladares ideológicos. Por tanto, no debe resultar sorprendente que los responsables de la crisis económica de 2008 fuéramos portugueses, irlandeses, griegos, italianos y españoles. Por tanto, no hay que espantarse ante las políticas exclusivas, que cierran puertas a inmigrantes, que se muestran insensibles ante desgracias ajenas. Porque quienes, de verdad, deciden en Europa son alemanes, holandeses, daneses, finlandeses, suecos… esto es, dignos herederos de aquellos que, hace cuatro siglos, iniciaron el camino hacia la barbarie…

Copyright del artículo © Mar Rey Bueno. Reservados todos los derechos.

Mar Rey Bueno

Mar Rey Bueno es doctora en Farmacia por la Universidad Complutense de Madrid. Realizó su tesis doctoral sobre terapéutica en la corte de los Austrias, trabajo que mereció el Premio Extraordinario de Doctorado.
Especializada en aspectos alquímicos, supersticiosos y terapéuticos en la España de la Edad Moderna, es autora de numerosos artículos, editados en publicaciones españolas e internacionales. Entre sus libros, figuran "El Hechizado. Medicina , alquimia y superstición en la corte de Carlos II" (1998), "Los amantes del arte sagrado" (2000), "Los señores del fuego. Destiladores y espagíricos en la corte de los Austrias" (2002), "Alquimia, el gran secreto" (2002), "Las plantas mágicas" (2002), "Magos y Reyes" (2004), "Quijote mágico. Los mundos encantados de un caballero hechizado" (2005), "Los libros malditos" (2005), "Inferno. Historia de una biblioteca maldita" (2007), "Historia de las hierbas mágicas y medicinales" (2008) y "Evas alquímicas" (2017).