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«Carta sobre el poder de la escritura», de Claude-Edmonde Magny

Carta sobre el poder de la escritura (Lettre sur le pouvoir d’écrire) es una epístola que Claude-Edmonde Magny escribió a Jorge Semprún en febrero de 1943. A la hora de editar esta carta en forma de libro, el propio Semprún decidió realizar un prólogo donde explica las razones de la autora.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Semprún combatió en la Resistencia francesa, pero fue capturado y llevado preso al campo de concentración de Buchenwald. Tras su liberación, se debatió entre la escritura o la vida. Escribir para contar el horror, y por consiguiente, revivir todo el mal que había presenciado, o no volver a recordar nada de Buchenwald, y proseguir una existencia de espaldas a toda aquella miseria, inhumanidad y terror.

De este dilema surgió el libro más íntimo y más trascendente de su carrera: La escritura o la vida, publicado en 1994. En él se decidió, después de muchos años, por la escritura. En definitiva, por el recuerdo y por la denuncia. Por dar a conocer cómo en esos años no se liberó de la muerte, sino que fue atravesado por ella.

Semprún optó por la escritura, aunque ésta le desgarrara el alma. En el prólogo a la obra que nos ocupa, señala que «la escritura me encerraba en el universo de la muerte, me asfixiaba inexorablemente» (1).

En este contexto se enmarca esta Carta en la que Claude-Edmonde Magny, mediante palabras llenas de belleza y amor, aconseja a Semprún que reflexione antes de decantarse por la escritura. A su modo de ver, escribir es un ejercicio peligroso. Supone una catarsis ‒desligarse de Buchenwald, del horror, de la experiencia de muerte, de los bríos de amor, del odio o de la miseria‒, pero las dagas clavadas en el corazón siempre duelen cuando las arrancas de la piel.

Para la autora, lo fundamental no es el poema o la narración, sino la experiencia interior de quien escribe. Dicho de otro modo, lo esencial es el poder que ejerce la escritura en todos nosotros.

Para Magny escribir es remover la angustia que se pega a la carne. O usando la expresión de Keats –un autor al que continuamente hace referencia‒ es el purgatorio ciego donde el escritor atraviesa el infierno para convertirse en poeta.

Este proceso es algo que no se puede fingir. Sólo el escritor que consigue elevarse puede realizar una verdadera creación literaria.

Claude-Edmonde Magny explica a Semprún que el terror que un día vivió debe transformarse en cósmico, y sólo así logrará «ser la transposición serena de una experiencia que fue atroz (…) pero una vez superada el poeta la abandonará, dejándola tras de sí. Y esta superación es la condición misma del poema» (2). Porque escribir es esa necesidad que tiene el autor de «extirparse del purgatorio en el que ante nuestros ojos desplegó sus quemaduras y sus heridas secretas» (3). Por eso el ejercicio de la escritura no está al alcance de todos, y es considerado por la autora como una actividad de lo más seria, donde se pone en juego la vida.

Escribir es entregarse al compromiso de la ascensión sin posibilidad de volver atrás. Una vez tomado ese camino, ya no cabe regresar: o el espíritu se transforma o se pierde. De ahí el peligro que conlleva.

Sin duda, Carta sobre el poder de la escritura es una obra extraordinaria, escrita con gran cuidado y afecto, que nos enseña cuál es verdadero significado del bello arte de escribir: purificar el alma, aunque nos cueste la vida. Y es que «nadie puede escribir si no tiene el corazón puro, es decir, si no se ha desprendido lo suficiente de sí mismo» (4).

Sinopsis

Prólogo de Jorge Semprún
Traducción de María Virginia Jaua

La Carta sobre el poder de la escritura  fue escrita por Claude-Edmonde Magny a Semprún en 1943. Ambos se habían conocido en 1939 en Francia, tras la derrota de la República española. Este pequeño pero mítico libro, que publicamos en una edición especial de tapa dura, con tela roja, como un breviario casi, contiene algunas grandes frases inolvidables, que serán siempre muy singulares tanto para los lectores como para aquellos que confían todavía hoy en el poder de la escritura: «Nadie puede escribir», dice Claude-Edmonde Magny, «si no tiene el corazón puro, es decir, si no se ha desprendido lo suficiente de sí mismo…». A lo que Semprún responde en su emocionante prólogo, escrito muchos años después: «Me esfuerzo en ello».

«Claude-Edmonde Magny me leyó su carta un amanecer de agosto, la víspera de Hiroshima. ¿Por qué ese día precisamente? Desde mi regreso de Buchenwald, me sentía atrapado en el inmóvil vértigo de dos necesidades o, mejor, dos deseos acuciantes pero contradictorios: el deseo de vivir, o de revivir, es decir, de olvidar, y el deseo de escribir, de elaborar y de trascender la experiencia del campo de concentración por medio de la escritura, es decir, de recordar, de revivir una y otra vez en la memoria la experiencia de la muerte. En esta situación, llegaba a experimentar momentos de felicidad: el placer violento de la vida recuperada no parecía privarme del ejercicio de memoria necesario para la escritura. Mientras que los demás momentos eran de una abominable angustia: la escritura me encerraba en el universo de la muerte, me asfixiaba inexorablemente. El día que evoco aquí, llamé a la puerta de Claude-Edmonde Magny, en la calle Schoelcher, a las seis de la mañana, después de una noche en vela de pesadilla y angustia. Me recibió, me ofreció un café muy cargado (café de verdad, se entiende: una proeza en 1945) y hablamos. En el contexto de aquella conversación me leyó su carta» (Del prólogo de Jorge Semprún).

Claude-Edmonde Magny, cuyo nombre verdadero era Edmonde Vinel, nació en 1913 y murió en 1966. Licenciada en Filosofía, única mujer de su promoción, fue profesora en los liceos Fénelon y Lamartine, creó para la editorial Seuil la prestigiosa colección «Pierres vives» y colaboró en revistas como EspritPoésie Preuves. Entre sus obras podemos citar, además de Carta sobre el poder de la escritura (1947), Les Sandales d’Empédocle: essai sur les limites de la littérature (1945) y la Histoire du roman français depuis 1918 (1950).

Notas

(1) Jorge Semprún, La escritura o la vida, trad. Thomas Kauf, Tusquets Editores, 2015, p. 9.

(2) Claude-Edmonde Magny, Carta sobre el poder de la escritura, trad. María Virgina Jaua, Editorial Periférica, España, 2016, p. 33

(3) Ibíd., p. 34

(4) Ibíd., p. 39

Copyright del artículo © Paula Sánchez Romero. Reservados todos los derechos.

Copyright de la sinopsis © Editorial Periférica. Reservados todos los derechos.

Paula Sánchez

Estudiante de Filosofía en la Universidad de Barcelona y de Ciencias Religiosas en el Institut Superior de Ciències Religioses de Barcelona (ISCREB). Combina sus estudios con distintos seminarios (sobre todo de teología, en el Centre d'Estudis Cristianisme i Justícia) y forma parte del Seminario de Teología y Ciencias de Barcelona (STICB).