Comprendo perfectamente el hechizo que despierta el recuerdo de Watchmen (1986). Y también comprendo que Alan Moore decidiera no involucrarse en las precuelas de su obra maestra. ¡Vaya sí lo comprendo!
Pero el rechazo de Moore no debe conducirnos a conclusiones aseguradas. Ni las secuelas carecen de calidad ‒todo lo contrario‒, ni Moore es un genio infalible ‒repito lo mismo‒. Es más, he leído estas prolongaciones de la serie de 1986 con un placer comparable, por sus dimensiones, al rechazo que he sentido al descubrir determinados productos del guionista británico (por ejemplo, Neonomicon o las entregas finales de La Liga de los Hombres Extraordinarios).
A la hora de justificar precuelas o secuelas, tanto en el cine como en el cómic o la literatura, conviene que prescindamos de los ambiguo porqués y nos centremos en la calidad del resultado. Es decir: qué consigue y con qué méritos. Otras dudas ‒si traiciona las intenciones de su precedente, o si lleva a los personajes por un camino nuevo‒ tienen el valor que tienen. Al fin y al cabo, este tipo de derivaciones creativas son, a la vez, producto de la urgencia comercial y de la obligación de satisfacer a un público que desea revivir viejas experiencias.
En este caso, Antes de Watchmen: Minutemen (2012), a través de sus seis entregas, relativizó los peligros de la reiteración y alcanzó el mismo nivel que los «capítulos» ‒vamos a llamarlos así‒ dedicados a Ozymandias, Rorschach o el Comediante. Es decir, un nivel alto, especialmente en su apartado gráfico. Lo cual no es fácil en un empeño tan ambicioso como el que suponía editar siete series limitadas en torno al pasado de Watchmen.
El autor de esta entrega, Darwyn Cooke, toma como eje de su narración a Hollis Mason, el primer Búho Nocturno. Cooke lo sitúa en los años cuarenta, mientras escribe e intenta publicar esas explosivas memorias que cuentan la verdad ‒su verdad‒ sobre los Minutemen. Como sucedía en la obra de Alan Moore y Dave Gibbons, este cómic explora los contrastes que suele haber entre la imagen pública y la intimidad de los héroes.
¿Son los enmascarados un producto de mercadotecnia o el fruto de una bravura y de una bondad genuinas? La interrogación, en este caso, permite a Cooke explorar ambas posibilidades con un tono entre desgarrado y melancólico. Como corresponde al caso, el romanticismo queda aquí paulatinamente sustituido por turbias conspiraciones.
Ya ha pasado el suficiente tiempo desde su primera edición como para que podamos leer este tebeo de Cooke sin repetir los prejuicios que acompañaron a su lanzamiento. No figuro entre los que niegan la posibilidad de construir bifurcaciones a través de obras maestras, ni siquiera cuando éstas se han mitificado y ocupan un lugar de privilegio en nuestra biblioteca. Al fin y al cabo, Antes de Watchmen: Minutemen cumple con su cometido, y lo hace de un modo muy competente, con detalles de auténtica brillantez estilística y explorando un registro novedoso.
A modo de complemento, el volumen publicado por ECC en 2017 incluye otras dos sólidas piezas: Moloch, de J. Michael Straczynski y Eduardo Risso, y Dolar Bill, de Len Wein y Steve Rude.
Sinopsis
Este volumen recrea las luces y las sombras que rodean el nacimiento de los Minutemen, primer grupo de superhéroes de Estados Unidos en el universo de Watchmen. En los años cuarenta, los Minutemen son un equipo formado por caracteres antagónicos cuyos peores enemigos se encuentran en sus propias filas. A esta historia se añaden dos más que ahondan en las trágicas biografías del héroe Dolar Bill y del villano Moloch.
En 2013, los títulos englobados bajo el lema Antes de Watchmen ampliaron el genial universo creado por Alan Moore y Dave Gibbons. Este volumen recupera las series limitadas Minutemen de Darwyn Cooke, Moloch de J. Michael Straczynski y Eduardo Risso, y el especial Dolar Bill, escrito por Len Wein y dibujado por Steve Rude.
EDICIÓN ORIGINAL: Before Watchmen: Minutemen núms. 1 a 6 USA, Before Watchmen: Dollar Bill núm. 1 USA, Before Watchmen: Moloch núms. 1 a 2 USA || FECHA PUBLICACIÓN: Enero de 2018 || GUIÓN: Darwyn Cooke, J. Michael Straczynski, Len Wein || DIBUJO: Darwyn Cooke, Eduardo Risso, Steve Rude.
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