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La Patrulla-X: «La Saga de Fénix Oscura» (1980) y «Días del futuro pasado» (1981)

Cómic del bueno, del que enciende la imaginación y apasiona. Cómic inteligente, ameno y sofisticado, que encaja en la línea de la mejor cultura popular. Cómic de héroes y villanos, que cruza todos los estados de ánimo y en el que se unen la estética y la excelencia narrativa. Eso es La Imposible Patrulla X. Una de esas creaciones que, después de leerlas o releerlas, dan la impresión de que el resto de los tebeos de superhéroes son pasatiempos para andar por casa.

¿Algo más? Aunque suene a tópico, diré que, gracias a las reediciones que ha venido haciendo Panini, es una suerte disfrutar de ese tesoro de dos maneras: en un volumen unitario (Marvel Must-Have. La Patrulla-X: La Saga de Fénix Oscura) o en un tomo en el cual se reúnen los mejores trabajos realizados por ese equipo de ensueño que formaron Chris ClaremontJohn Byrne y Terry Austin (Marvel Gold. La Imposible Patrulla-X 2).

La primera opción se recomienda sola, pero si el lector quiere ir más allá, les recuerdo que ese ómnibus –el segundo volumen de los dos que formaron la entrega: 656 páginas apretadas e imprescindibles– luce la inolvidable portada que Byrne realizó para X-Men vol. 1, 141 (enero de 1981). Sólo con echar un vistazo a esa cubierta, uno comprende que no se trata de una obra cualquiera.

Aviso a los nostálgicos: en las páginas de ese tomo se reúnen las dos mejores sagas de la Patrulla, la de Fénix Oscura y Días del futuro pasado. Lo cual, se mire por donde se mire, también son palabras mayores.

Para este viaje, resulta difícil imaginar un guía mejor que Claremont. Entre otras cosas, porque lleva en la Casa de las Ideas desde 1969, y porque ha crecido como narrador a la sombra de Roy Thomas. Fue el propio Thomas quien asignó a Claremont su primer trabajo como guionista: Daredevil nº 102 (agosto de 1973). Un año después, éste unió sus fuerzas a las de John Byrne para elaborar juntos las historietas de Puño de Hierro.

El editor jefe de Marvel por aquellas fechas, Len Wein, supo ver que Claremont también soñaba con ocuparse de los X-Men. Y ahí comenzó a forjarse su leyenda.

En el fondo, Claremont sabía que podía hacer madurar a los integrantes de la Patrulla X. Es más, quiso reinventarlos con la seriedad de un buen novelista. Por eso mismo, situó a estos personajes ante el miedo y la incertidumbre, o para ser más exactos, ante sus propios demonios. Sin límites ni barreras morales.

A estas alturas, parece fácil, pero hay que retroceder en el tiempo para valorarlo en su justa medida. Cuando leemos a Claremont tenemos el convencimiento de que no piensa en los mutantes como héroes unidimensionales, sino como criaturas de carne y hueso, que siguen siéndolo aunque llenen su calendario de nobles causas.

Destinos truncados

Como dije, este ciclo narrativo está lleno de ideas y de situaciones destinadas a perdurar. Raro es el aficionado de mi generación que no haya leído, o mejor dicho, que no se haya sentido atrapado por la saga de Fénix Oscura (enero-octubre de 1980).

A decir verdad, Claremont siempre fue un valedor incondicional de las superheroínas, empezando por Jean Grey, Kitty Pride y Ororo Munroe.

Con todo, la primera, Jean, es su mejor hallazgo. En especial cuando la somete al dramático proceso que conduce a su dominación por parte de la entidad Fénix Oscura (The X-Men nº 129-138, 1980).

La corrupción y caída de una mujer tan íntegra como Jean permanece vigente en términos narrativos, y resulta igual de poderosa y actual que otras historias mucho más recientes de ídolos derrumbados. En este sentido, es obvio que Claremont se anticipó a guionistas como Alan Moore y Frank Miller, expertos en este tipo de decadencia.

No adelantaré detalles de la trama –siempre habrá nuevos lectores para esta obra–, pero creo que la magnitud de este arco argumental se mide por sus consecuencias: un genocidio, una supernova y el final de un romance prometedor.

¿De qué fuentes bebió Claremont para idear semejante apocalipsis? Lo ignoro. Pero este es uno de esos cataclismos cuya huella perduró durante años en el Universo Marvel. En concreto, hasta que en 2005 se dio a conocer el arco argumental Phoenix: Endsong, que supuso el conmovedor y momentáneo retorno de Jean Grey.

Un futuro alternativo

El otro ciclo que nos ocupa, Días del futuro pasado («Days of Future Past», The Uncanny X-Men nº 141-142, enero-febrero de 1981) propone una distopía digna de la mejor ciencia-ficción.

En Norteamérica, en 2013, aquellos humanos que poseen genes mutantes son apartados en centros de concentración, vigilados por los Centinelas. Además, deben llevar collares inhibidores que anulan sus poderes. Casi todos los Hombres-X han muerto, pero aún resisten una madura Kate Pryde, Lobezno, Tormenta y Coloso.

En otro plano temporal –en concreto, el 31 de octubre de 1980–, la Patrulla X aún no sabe que las elecciones presidenciales que están a punto de celebrarse tendrán un final trágico. La Hermandad de Mutantes Diabólicos pretende asesinar al candidato Robert Kelly, al profesor Charles Xavier y a Moira McTaggert. Con ello, el hilo de la historia cambiará, conduciendo a un desastre nuclear.

Por todo ello, la vieja Kate Pryde ha de transferir su mente a la joven Kitty, con el fin de evitar una calamidad que parece inevitable.

A Claremont y a Byrne les debemos gratitud por este nuevo éxito, que además consolidó el prestigio de ambos. De hecho, cuando en 2001 se organizó una consulta entre los seguidores de la Casa de las Ideas, Días del futuro pasado entró en la lista de los veinticinco mejores cómics de toda la historia de Marvel.

En fin, hasta aquí llega mi recomendación. Como veis, en este grueso tomo pueden encontrarse un par de obras maestras. Por si ello no bastara, también figuran artículos especializados, testimonios del equipo, historietas complementarias y fantásticos bocetos. Ni más ni menos.

Sinopsis: Marvel Must-Have. La Patrulla-X: La Saga de Fénix Oscura

¡Un relato épico de triunfo y tragedia! Cuando Fénix Oscura se alza, las estrellas y los mundos mueren. Ahora, este avatar se ha encarnado en Jean Grey. La Patrulla-X debe decidir si salvar el universo o salvar a su compañera más querida, en el relato que redefinió los mitos mutantes.

Autores: John Byrne, Chris Claremont

Contiene The X-Men 129-137

Sinopsis: Marvel Gold. La Imposible Patrulla-X 2

El esperado segundo volumen de Marvel Gold. La Imposible Patrulla-X, con el que se completa la inmortal etapa de Chris Claremont y John Byrne al frente del destino de los mutantes.

Son las historias que definieron a varias generaciones de lectores y asentaron las bases sobre las que se movería el cómic durante las siguientes décadas, una escalada alucinante e imparable que conjuga la saga de Proteus, Fénix Oscura, el Club Fuego Infernal, el regreso de Lobezno a Canadá, «Días del futuro pasado»…

Guión: Chris Claremont, John Byrne, Scott Edelman y Mary Jo Duffy

Dibujo: John Byrne, George Pérez, John Romita Jr., Brent Anderson, John Buscema y Dave Cockrum

Contiene Uncanny X-Men 122-143, Annual 3 y 4, Marvel Treasury Edition 27, Marvel Team-Up 100, Phoenix: The Untold Story y Bizarre Adventures 27 USA

Copyright del artículo © Guzmán Urrero. Reservados todos los derechos.

Copyright de imágenes y sinopsis © Marvel Comics. Cortesía de Panini Cómics. Reservados todos los derechos.

Guzmán Urrero

Colaborador de la sección cultural de 'The Objective'. Escribió de forma habitual en 'La Lectura', revista cultural de 'El Mundo'. Tras una etapa profesional en la Agencia EFE, se convirtió en colaborador de las páginas de cultura del diario 'ABC' y de revistas como "Cuadernos Hispanoamericanos", "Álbum Letras-Artes" y "Scherzo".
Como colaborador honorífico de la Universidad Complutense de Madrid, se ocupó del diseño de recursos educativos, una actividad que también realizó en instituciones como el Centro Nacional de Información y Comunicación Educativa (Ministerio de Educación, Cultura y Deporte).
Asimismo, accedió al sector tecnológico como autor en las enciclopedias de Micronet y Microsoft, al tiempo que emprendía una larga trayectoria en el Instituto Cervantes, preparando exposiciones digitales y numerosos proyectos de divulgación sobre temas literarios y artísticos. Ha trabajado en el sector editorial y es autor de trece libros (en papel) sobre arte y cultura audiovisual.