Vicente Díaz¿Qué línea separa el suspense del terror? Un ejercicio estimulante para el aficionado al cine de género puede ser intentar localizar esa frontera en esta notable película de André Øvredal, director noruego que llamó la atención mundial hace unos años con su sorprendente Trollhunter (2010).
Con el espíritu de las clásicas historietas macabras al gusto de Historias de la Cripta, La autopsia de Jane Doe es una película de argumento muy sencillo, pero que pone difícil el comentario libre de spoilers.
Aunque se disfruta de cabo a rabo, la cinta alcanza su mayor intensidad en toda la parte inicial, consistente en una autopsia y un enigma. Y es que el misterio, casi siempre, es más interesante que la explicación del mismo. ¿Qué oculta el extraño cadáver? Cuando se nos revela, podemos sorprendernos, pero esa sensación es menos fuerte que la curiosidad previa.
Un reparto muy reducido y acertado (¿alguna vez ha defraudado Brian Cox?) y una localización muy concreta (una vieja morgue) son las grandes bazas de una película que inquieta y perturba en ocasiones, y en otras cae en los trucos facilones (sustos baratos mil veces usados, golpes de música…), haciendo equilibrios entre el cine de género de calidad y el producto adolescente para multicines.
Por otro lado, La autopsia de Jane Doe cuenta con un monstruo memorable, entre otras cosas porque podría ser un monstruo o no, según se mire, y que básicamente lo único que hace es estar muerto y tumbado. Toda una novedad en el bestiario cinematográfico que, con un poco de éxito, podría ser carne (ja) de franquicia.
Al tratarse de una película sobre una autopsia (especialmente extraña, además), puede no ser del gusto de todos los estómagos, aunque precisamente por tratarse de algo tan extraño e increíble se elimina el toque realista, atenuando el factor desagradable.
Finalmente, para el que quiera sacarle más provecho a la experiencia, está la reflexión sobre la cosificación de la mujer y la histórica opresión que ha sufrido el género femenino, pero explicar más sería destripar (ja, de nuevo) el argumento.
Una refrescante y muy recomendable película que no debería perderse ningún seguidor del cine de misterio y terror.
Sinopsis
El cuerpo de una joven sin identificar aparece en un pequeño pueblo de Virginia. En el depósito de cadáveres, los dos forenses ‒Tommy y Austin, padre e hijo‒ pronto observan evidencias físicas muy extrañas. Con precisión metódica, su autopsia pone al descubierto los secretos ocultos tras el cadáver.
André Øvredal, el realizador de Trollhunter, dirige a Emile Hirsch (Hacia rutas salvajes) y Brian Cox (Churchill) en esta historia terrorífica que impactó al público de Sitges.
Tras su presentación en la sección Midnight Madness del Festival de Toronto, La autopsia de Jane Doe se ha alzado con varios premios: Festival de Sitges (Premio Especial del Jurado), Fantastic Fest de Austin (Mejor Película de Terror), Semana de Cine de Terror de Donostia (2ª posición del Premio del Público), Festival de Terror de Molins de Rei (Mejores Efectos Visuales).
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Guzmán Urrero
