Mi pareja favorita de heroínas del cine: Kyeong-seon (Lee Hye-yeong) y Su-ji (Jeon Do-yeon), una veterana ex delincuente malviviendo del taxi y una aspirante a cantante pop metida a novia de gángster maltratador.
Ambas se unen por necesidad y le dan su merecido a todos. Son mi ‘Thelma y Louise’ particulares: de la primera tengo su desencanto de alma vieja y de la segunda su inocencia infantil. Juntas forman una combinación letal.
No Blood No Tears (Pido nunmuldo eobshi, 2002) fue mi aportación más entusiasta como miembro del comité de selección del Festival de Cine Fantástico de Sitges y rastreador en Cannes, como hace poco recordó, con clase y detalle, su veterano director Ángel Sala en una entrevista para Cineasionline com. Ryoo Seung-wan es mi realizador coreano favorito y de su docena de filmes he visto todos menos los dos últimos. Incluso gracias a Sitges y a la bendita Gloria (Fernández), pude entrevistarlo hace unos años.
Lo que tengo esperando en mi antiguo hogar es este póster precioso de Kyeong-seon y Su-ji, aguardando enmarcado a que un día lo traiga volando a Lima.
Me gustaría colgarlo en mi nuevo estudio y escrutarlo de vez en cuando, para proyectar mi feo rostro en esos rostros hermosos, descreído sin querer el uno y descerebrado adrede el otro. ¡Cómo las entiendo!
Y me preguntaría qué habrá sido de esas dos balas perdidas, adónde habrán podido huir del mundo quince años después.
Merecieron ser felices…
Sinopsis
Ejemplo del Hallyu, la Ola Coreana, No Blood, No Tears es un elegante thriller de cine negro que combina el drama criminal de gánsteres con las artes marciales, y que además subvierte el predominio masculino de ambos géneros con dos mujeres muy duras. Kyeong-seon (Hye-yeong Lee) es una taxista muy inteligente, cuyo marido la ha cargado con deudas de juego que debe a violentos usureros. Su-ji (Do-yeon Jeon) sueña con ser una estrella del pop mientras lidia con el abuso físico de su ex-novio, el boxeador Dok-Bul (Jae-yeong Jeong), que ahora trabaja para el notorio gángster KGB (Goo Shin). Cuando Kyeong-seon y Su-ji se encuentran en un fatídico accidente de tráfico, deciden cambiar sus vidas, al estilo Thelma & Louise, robando dinero del circuito de peleas de perros que organiza KGB. Se trata de un esfuerzo arriesgado que las obliga a enfrentarse con toda suerte de gánsteres y matones. A menudo comparado con el maestro de la violencia Quentin Tarantino, el director Seung-wan Ryoo realza esta emocionante cinta de atracos con una cinematografía sombría, un montaje ultrarrápido, y secuencias de lucha realistas, coreografiadas por el maestro de tae-kwon-do Doo-hong Jung.
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