La edición española de Los Alpes en invierno nos remite a una época en la que el montañismo era algo diferente a lo que es hoy. Ese mundo de los alpinistas de antaño, hasta bien entrado el siglo XX, estaba poblado por historias románticas, por experiencias iniciáticas y por fábulas que hoy parecen más próximas a la poesía que al deporte de riesgo.
El autor de esta obra, el filósofo Sir Leslie Stephen (1832-1904), sembró de vértigo la memoria colectiva de los británicos, pero no ha pasado a la historia sólo en su faceta de montañero, sino también por razones familiares. No olvidemos que Stephen fue el padre de Virginia Woolf y de Vanessa Bell.
Críado en una familia muy bien situada socialmente, y educado en el Eton College, el King’s College de Londres y en el Trinity Hall de Cambridge ‒la aristocracia educativa inglesa‒, Stephen se aproximó desde su juventud al entorno académico e intelectual más selecto.
No obstante, al margen de sus vínculos literarios, hay una experiencia que adquiere relevancia a la hora de hablar sobre el libro que nos ocupa: su viaje de bodas a los Alpes suizos y al norte de Italia en 1867, tras su matrimonio con Harriet Marian (1840–1875), hija del novelista William Makepeace Thackeray, autor de obras tan conocidas como Las aventuras de Barry Lyndon (1844) y La feria de las vanidades (1847).
Tras enviudar, Stephen se casó con Julia Prinsep Duckworth (1846-1895), modelo de pintores prerrafaelistas como Edward Burne-Jones y madre de las ya citadas Vanessa y Virginia, quien tomó el apellido de su esposo, Leonard Woolf.
Aunque sus ensayos y artículos aparecieron en diversas publicaciones, los primeros textos que Stephen dedicó a la montaña aparecieron en Peaks, Passes and Glaciers (1862), donde colaboraron otros miembros del Alpine Club, del que fue presidente tras coronar cimas inaccesibles.
Desde su primera edición, otro de sus libros vinculados al montañismo y a los paisajes alpinos, The Playground of Europe (1871), se convirtió en una obra de lectura obligada para todos aquellos que aspiraban a ascender a una cumbre en el Reino Unido.
Sin duda, la lectura de Los Alpes en invierno ‒una selección de The Playground of Europe y de Studies of a biographer‒ es inspiradora por razones filosóficas, sobre todo cuando el autor reflexiona sobre la esencia de la naturaleza y el modo en que ésta llega a conmover al ser humano.
«El océano es el único rival de las montañas ‒nos dice Stephen‒. (…) Se puede hablar con propiedad tanto de un mar de montañas como de una ola del tamaño de una montaña, pero a mí siempre me parece que en la comparación sale perdiendo el paisaje que da una apariencia mayor de unidad orgánica. El mar, a su manera, está muy bien, pero es un elemento incómodo, que no para quieto; la vista que tenemos de él siempre es parcial y, en ocasiones, tremendamente monótona. (…) Hay sueños y sueños. Y el mérito especial que tiene la montaña como marco, reside en la mezcla armoniosa de ciertas vetas de emoción que no se pueden disfrutar juntas en ningún otro entorno».
Sinopsis
Prólogo de Virginia Woolf
Traducido por Carlos Jiménez Arribas
Apasionado amante del paseo y pionero del alpinismo, Leslie Stephen supo encontrar en la naturaleza tanto un fortalecedor elixir vital como un inagotable venero de revelación espiritual. Los tres textos reunidos en este volumen, donde los grandiosos paisajes descritos quedan sublimados por una prosa excepcional, operan en realidad como pequeños tratados filosóficos en los que se aboga por la doble necesidad contenida en el mens sana in corpore sano.
Así pues, ya sea a través de la campiña inglesa o por los escarpados montes alpinos, el caminar participa de un trascendente ejercicio de comunión, de una liberadora ascesis al alcance de todos los seres humanos.
Leslie Stephen (Londres, 1832-1904), padre de la famosa escritora Virginia Woolf, fue una de las más eminentes figuras de la Inglaterra victoriana. Entre sus muchos trabajos sobre pensamiento político y literatura, destacan especialmente History of English Thought in the Eighteenth Century (1876), The Science of Ethics (1882) y su contribución al monumental Dictionary of National Biography (1885-1891).
Además, fue editor del Alpine Journal, cofundó el Alpine Club y fue uno de los primeros en coronar, durante la edad de oro del alpinismo, todas las altas cumbres de los Alpes.
Copyright del artículo © Guzmán Urrero. Reservados todos los derechos.
Copyright de imágenes y sinopsis © Siruela. Reservados todos los derechos.