Vicente DíazJoss Whedon es un cineasta y escritor muy creativo. Tanto, que para descansar y divertirse, hace cosas como esta pequeña película, rodada entre amigos en un par de semanas, en el «tiempo libre» entre el rodaje y la postproducción de su mega–éxito Los Vengadores.
¿Es una nueva adaptación de la obra de Shakespeare? Sí, PERO…
El film transcurre en una lujosa casa de Los Ángeles, y sus protagonistas son VIPs trajeados de la alta sociedad. Protagonizan una típica comedia romántica hollywoodiense, de aroma clásico y repleta de diálogos con el tempo y los rasgos típicos de Whedon, pero lo que sale por la boca de los actores es el texto de Shakespeare.
Más que adaptar la obra teatral, uno diría que Whedon está tratando de presentar una comedia de Hollywood a un grupo de viajeros del tiempo procedente de la época isabelina.
El director echa mano de algunos de sus actores habituales para jugar y entretenerse, y de paso, contar una eterna historia sobre la condición humana, rindiendo así tributo a uno de los escritores a los que mejor le salieron esas cosas.
Sinopsis
¿Qué hacer después de haber realizado una de las películas de superhéroes más espectaculares y exitosas de todos los tiempos? La respuesta parece fácil: una fiesta. Eso es, precisamente, Much Ado About Nothing, rodada en 12 días en la casa de Joss Whedon con un equipo formado por colegas y amigos. El resultado es una brillante adaptación de la obra de William Shakespeare, por cuyas imágenes en blanco y negro se cuelan los ecos jazzy del cine de John Cassavetes.
Director, guionista y productor, con Buffy la cazavampiros (1997–2003) Whedon obtuvo un culto duradero, renovado con producciones como Firefly (2002). Fue co–guionista de The Cabin in the Woods (2012) y llevó a la pantalla las aventuras de Los vengadores (2012).
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Copyright de la sinopsis © Sitges 2013. 46 Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya. Reservados todos los derechos.
Fernando Fraga
Guzmán Urrero
