1957, la URSS lanza al espacio el Sputnik, el primer satélite artificial, dándose así inicio a la carrera espacial. El programa de los Estados Unidos no acaba de despegar, y la tragedia del Apollo 1 en el 67 parece enterrar las esperanzas de la NASA de poner al primer hombre en la Luna. El público está perdiendo el interés, y los fondos no llegan.
Pero esto está a punto de cambiar cuando la publicista Kelly Jones (Scarlett Johansson) se incorpora al proyecto aeroespacial con un revolucionario concepto: “vender” la Luna.
Magnífica y deliciosa comedia romántica dirigida por Greg Berlanti, al más puro estilo clásico del género, que mantiene en el espectador la sonrisa y el interés, haciéndole partícipe de la emoción que despiertan tanto el evento histórico, como la relación que nace entre la pareja protagonista.
Cole Davis (Channing Tatum), director del proyecto Apollo 11, se ve permanentemente sofocado por los problemas técnicos que amenazan el éxito de la misión, cuando una atractiva mujer irrumpe en su vida -y en su corazón-, para ponerlo todo patas arriba. Kelly aterriza con unos audaces métodos de marketing en un mundo de hombres poco dado a los detalles y a la magia de la publicidad, para intentar que el público se enamore de los astronautas, y del deseo de llegar con ellos al satélite natural que nos acompaña desde la noche de los tiempos.
Scarlett Johanson está imperial, y se consagra como gran actriz de las de verdad, si no lo estaba ya, estatus que quizá se le niega porque, al igual que pasaba con Marilyn Monroe, el físico a veces no nos deja ver a la artista que hay detrás. Simpatiquísima, dulce, madura, frágil y valiente. Sencillamente adorable, la Johansson borda en esta película un papel de los de imprimir en póster y enmarcar. Y lo hace ataviada con un catálogo de preciosos outfits monocolor sacados de una revista Vogue de la mejor época.
Más rígido y tenso está en su papel de mocetón responsable su partener Channing Tatum, quien sin embargo luce con solvencia una serie de polos ajustados que recuerdan a los uniformes de la tripulación del Enterprise, en especial uno en color mostaza que hace rememorar al propio capitán Kirk en la sala de mandos del cotarro espacial.
La guerra de Vietnam es una funesta competencia, las noticias que llegan de Asia eclipsan la Luna en Estados Unidos. Kelly lo sabe y debe salvar lo imposible. “Todo el mundo es un cliente”, y esta moto hay que venderla, a ser posible con ruedas.
Un detalle más, sin entrar en spoilers…
No todo será tan de color de rosa. Como pueden ver en el trailer, entra en escena Moe Bekus (Woody Harrelson), un oscuro funcionario que trabaja para la administración Nixon. Bekus origina una situación que comprometerá a la publicista y obliga a montar un paripé que será mejor que descubra por sí mismo el espectador.
Y es que esta injerencia da un giro al argumento, añadiéndole tensión dramática y comicidad a partes iguales, un delicado asunto conspiranoico que acaba insuflando a la historia la dosis precisa de emoción y acción que tan atinadamente la redondean.
Fly me to the Moon es una de esas escasas películas que quieres volver a ver de nuevo, que te ronda como un satélite al salir de la sala. Una hermosa fantasía, un sueño estiloso y dulce que parece extraído de un viejo álbum de fotos de familia, pero con una frescura y un colorido que elevan a esta cinta al pedestal de las películas que nunca hay que dejar de hacer.
Cuando el cine te baja la Luna, y te eleva al cielo hasta el infinito y más allá, súbete al cohete, quizá no vuelva a despegar otro igual.
Sinopsis
Protagonizada por Scarlett Johansson y Channing Tatum, Fly me to the moon es una comedia dramática, inteligente y elegante, ambientada en el histórico alunizaje del Apolo 11. Llamados para mejorar la imagen pública de la NASA, las chispas vuelan en todas las direcciones cuando la prodigio del marketing Kelly Jones (Johansson) causa estragos en la ya difícil tarea del director del lanzamiento Cole Davis (Tatum). Cuando la Casa Blanca considera que la misión es demasiado importante para fracasar, Jones recibe la orden de simular un alunizaje falso como respaldo, comenzando la verdadera cuenta atrás…
Copyright del artículo © Fernando Mircala. Reservados todos los derechos.
Copyright de imágenes y sinopsis © Berlanti Productions, Apple Studios, Apple Original Films, These Pictures, Scott Free Productions, Sony Pictures. Reservados todos los derechos.