¿Quién enseña más, el maestro o el aprendiz? Ese clásico tema es uno de los principales entre los que se abordan en esta simpática película de Mamoru Hosoda, a quien a veces le toca llevar la etiqueta de “sucesor de Miyazaki”. Etiquetas, en fin…
Aunque menos espectacular en lo técnico que las producciones de Studio Ghibli, esta cinta mantiene un buen nivel artístico, tanto en la creación de los personajes principales como en el doble entorno en el que se desarrolla la historia, un Tokio actual y realista y un mundo habitado por hombres–bestia, animales antropomórficos amantes de la paz y la armonía.
En El niño y la bestia hay momentos de acción, pero no es el elemento predominante. Lo importante aquí es la evolución del niño protagonista, un chaval desarraigado que se tiene que valer por su cuenta para crecer y madurar, sin verdaderos referentes paternos sólidos de los que aprender, ni este mundo ni en el de las bestias.
La gran lucha del muchacho no es contra el mundo (o los mundos), sino contra sí mismo. Lo tiene muy fácil para caer en el lado oscuro, pero se esfuerza para ser una persona mejor, lo cual sirve de inspiración para su desastroso maestro de artes marciales en el mundo de las bestias, una especie de oso haragán y pendenciero, de gran potencial para la lucha pero con un escaso control de su genio.
Los momentos más divertidos de El niño y la bestia son las grescas entre maestro y aprendiz, que lejos de crear antipatía por los personajes, los hacen más entrañables. Cada una de estas peleas suele llevar a un momento de mutua admiración (silenciosa) y refuerza el vínculo entre bestia y humano.
Nos encontramos ante una buena película infantil, diferente de las producciones que suelen dominar la cartelera destinada a los más pequeños, y ya sólo por eso es más que recomendable para los progenitores con inquietudes que no quieren “alimentar” a sus hijos con productos culturales clónicos.
Sinopsis
A medida que la sociedad moderna va evolucionando también cambian los valores de la familia tradicional. Estos valores tradicionales dejan de ser válidos, y hoy en día nos encontramos ante la necesidad de dotar de un nuevo sentido a la familia. ¿Cómo contribuir al proceso de maduración de los niños de hoy en día? Y nosotros, adultos de esta nueva era, ¿qué valores deberíamos mostrar y transmitir a las próximas generaciones? Esta película nos permite reflexionar y tratar de dar respuesta a todas estas cuestiones.
El niño y la bestia narra la historia de un niño fuerte y solitario, y de una bestia egoísta y solitaria también. Poco a poco consiguen crear entre ellos un vínculo sólido idéntico al que se crea en toda relación auténtica entre padre e hijo a través de su formación y batallas.
Para los niños es un emocionante cuento de hadas sobre las aventuras que suceden con una Bestia.
Para los adolescentes será un referente y tratará de dar respuesta a la pregunta que se repiten con tanta frecuencia durante la adolescencia: “¿quién soy yo?”
Y para los adultos será una experiencia que les llenará de alegría y satisfacción al convertirse en testigos de una relación de tú a tú tan especial entre el niño y la Bestia.
Fieles a las características del entretenimiento nuestro objetivo es conseguir que esta película sea una experiencia gratificante para todos los públicos.
Gracias a títulos como La chica que saltaba a través del tiempo (2006), Guerras de verano (2009) y Niños lobo (2012), Mamoru Hosoda se ha convertido en el director de animación más importante del mundo y sus películas han sido calificadas de obras de arte y han arrasado con los premios de las academias de cine tanto en su país como en el extranjero.
Entrevista a Mamoru Hosada
P: ¿Qué le inspiró a escribir El niño y la bestia?
Mi principal fuente de inspiración fue mi hijo, que nació hace tres años tras el estreno de mi película anterior, Niños lobo. Lo que me inspiró a filmar Niños lobo fue que “no hay películas acerca de lo difícil – aunque maravilloso– que resulta para una madre criar a sus hijos” Esta vez reflexiono acerca de “cómo los niños crecen y maduran en este mundo”. Aparentemente son los padres los que se encargan de la crianza de sus hijos, pero no siempre es así. En este caso hay un niño que se olvida de su padre y conoce a alguien que lo alimenta espiritualmente, y la presencia de esta persona es cada vez más y más fuerte. En ese momento se olvida de su padre, en otras palabras, se olvida de mi (risas). Me encantaría ver madurar de este modo a mi hijo. La película pretende analizar como un niño crece bajo la influencia de un grupo de personas. No creo que haya ninguna película así, lo que en sí es un gran desafío.
P: ¿Por qué escogió Shibuya como escenario de la película?
Toda la película tiene lugar en Shibuya, a pesar de que esto plantea bastantes dificultades. Guerras de verano se filmó en Ueda, Nagano, y Niños lobo en Toyama, mi ciudad natal y la ciudad en la que crecí. Escribí estas dos historias en un entorno rural. En este caso, el entorno es distinto y la aventura tiene lugar en una gran ciudad. La idea de “aventura” suele asociarse a viajar a un país extranjero lejos de casa. Sin embargo, creo que es posible llegar a entusiasmarse y asombrarse en una ciudad que uno conoce, por muy familiar que le resulte.
Shibuya, como sabrá, es un espacio muy atractivo para muchas personas y un lugar fascinante en constante evolución. Quería filmar allí una película a mi antojo. Shibuya es más que una estación en un póster. Lugares como Hatagaya y Yoyogi Park tambien existen en Shibuya (risas), y suceden cosas constantemente. Ha sido un reto filmar en la Shibuya urbana, pero como el cine continúa evolucionando empiezo a pensar que es un lugar ya listo para la aventura.
P: El reparto incluye todo un elenco de super estrellas. En primer lugar, ¿qué tal Koji Yajusho en su papel de Kumatetsu?
Es un honor para mí y una gran satisfacción que el gran Yakusho aceptara protagonizar mi película, y, además, interpretar a una Bestia llamada Kumatetsu. Cuando escuché por primera vez la grabación de prueba, pensé “así que ésta es la voz de Kumatetsu, ¡por fin conozco a Kumatetsu!”. Cuantas más líneas grababa Yakusho más se iba transformando en oso (risas). Él y Kumatetsu acaban convirtiéndose en uno solo así que estoy empezando a pensar que en su vida anterior fue un oso. Pensé que utilizaría sus cualides como actor para transmitir la torpeza y crudeza del personaje de Kumatetsu, que son los defectos que lo hacen más atractivo, pero en la cabina de doblaje no parece estar imitando a nadie. Es una sensación muy agradable y a la vez sorprendente y me pregunto constantemente cómo consigue hacerlo.
P: ¿Cómo es Aoi Miyazaki como niño Kyuta?
Cuando acabé de filmar Niños lobo quería ver la otra cara de Miyazaki y trabajar con ella de nuevo incluso antes de decidir el contenido de mi película siguiente. Acabé de redactar el guión de El Niño y la Bestia y le ofrecí el papel de niño. En el mundo de la animación la voz de niño suelen interpretarla mujeres adultas. Si Miyazaki hacía el papel de Kyuta, pensé que su obstinación, en el buen sentido, y la tozudez de Kyuta encajarían a la perfección y dotarían de fuerza al personaje. Desempeña el papel del personaje con el brillo propio de una mujer, pero al mismo tiempo su voz suena tan clara como la de un niño. Y no utiliza ninguna técnica para conseguirlo. Deja fluir el alma. No tiene que hacer ningún esfuerzo para sonar como un niño y me sorprende lo bien que lo consigue.
P: ¿Y Shota Sometani en el papel de joven Kyuta?
Lo conocí cuando se presentó a la audición para Niños lobo y quedé prendado de su increíble talento. Lamentablemente la película no tenía ningún personaje que encajara con su edad, así que le dí un pequeño papel como profesor de escuela elemental. Pero quería verle representar un papel protagonista y trabajar con él así que cuando terminó la filmación le ofrecí inmediatamente el papel de Kyuta. Jamás imagine que Miyazaki y Sometani, con los que quería trabajar, representarían el mismo personaje, pero la transición del Kyota de Miyazaki al Kyota adulto de Sometani es impecable. Hice incluso que se conocieran para hacer una prueba de grabación antes del doblaje, lo que probablemente fue una buena idea ya que se tuvieron en cuenta mutuamente al actuar.
Crítica del artículo © Vicente Díaz. Reservados todos los derechos.
Crítica de imágenes y sinopsis © A Contracorriente Films. Reservados todos los derechos.