Mar Rey Bueno
Una de las joyas de mi colección: El problema de los sexos. Matrimonio, unión libre y amor sin convivencia, de Federica Montseny. Publicado en Toulouse, en 1948, por Ediciones Universo, dentro de la colección “El mundo al día”.
Entre 1939 y 1978 existió una gran producción anarquista y libertaria en aquel Toulouse que se transformó en refugio y medio de vida para tantos exiliados españoles. Entre ellos, Federica, primera mujer ministra de nuestro país.
El problema de los sexos se había publicado, de forma parcial, en la España de 1931, en La Revista Blanca, dirigida y editada por los padres de Federica. Diecisiete años después, la ex ministra de Sanidad reúne aquellos escritos y los incrementa. En el Prefacio pueden leerse unas palabras que, como el resto del libro, no han perdido frescura ni actualidad:
“Hoy hay en mí un sentimiento más sereno de compasión; quizá también esa superioridad de corazón que da a la mujer la maternidad. El hombre no es ya para mí el opresor, el enigma, la potencia misteriosa y milenaria con que se aprestaban a luchar mis jóvenes fuerzas de amazona. Hoy es un ser cuyas íntimas indefensiones conozco, cuyo inmenso desamparo me apiada, cuya fuerza me hace sonreír, sobre cuya tragedia moral y física me inclino con la constante indulgencia de las madres. No lucho ya con él, dispuesta a vencer o a no ser vencida; quiero simplemente ayudarle a salvarse a sí mismo, a encontrar la vía de la libertad y de la felicidad en el amor y en la vida.
Dedico este prefacio a mis hijas, y pienso, no obstante, sobre todo en mi hijo al trazar estas líneas. En su incipiente orgullo de macho, en sus arrebatos, en sus violencias, en su gracioso sentido de superioridad, en su tonillo de protección, en todo lo que en él pone ya el eterno masculino. Y ante esa larva de hombre, cuyos defectos varoniles se acusan ya con vigoroso relieve, asisto al desarrollo de todo el imponderable masculino, percibo, con más claridad que nunca, cuánto hay de inconsciente y determinado por la naturaleza en el drama del hombre.”
Un día como hoy [12 de febrero de 2021] debería ser recordado de forma muy especial en este país nuestro, porque un 12 de febrero de 1888, nacía Clara Campoamor, la mujer que peleó y consiguió el voto para todas nosotras; y un 12 de febrero, también, pero de 1905, nacía Federica Montseny, la primera ministra anarquista de nuestra historia, la primera que trabajó por una Ley del Aborto, aunque ella estaba claramente a favor de la maternidad. Dos mujeres extraordinarias, libres, comprometidas, excelentes escritoras y fieles a sus creencias.
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