Cualia.es

Crítica: «Sonic 2: La película» (Jeff Fowler, 2022)

Cuando éramos unos chavales ‒en los tiempos del VHS y la sesión continua‒, las llamábamos películas toleradas. Uno ya sabía a qué atenerse con ellas. Nada de excesos adultos. Solo diversión, humor y aventura para toda la familia. ¿Y cuál era su sello característico? Pues exactamente ese: un diseño al milímetro para que pudieran agradar y entretener a grandes y pequeños.

El problema es que, bien porque nos hemos infantilizado todos, bien porque las franjas de edad son cosa del pasado, resulta difícil encontrar un cine infantil y juvenil con el tono de otros tiempos. De ahí que, en su día, fuera tan grato el estreno de Sonic, la película (2020), un film que precisamente asume esas características: muy divertido y con una trama a medio camino entre la ciencia ficción, el cartoon y la comedia familiar.

Todo lo que funcionaba en esa primera entrega retorna en su secuela. A lo largo de Sonic 2: La película, volvemos a encontrarnos con un villano impecable (Jim Carrey, en el papel del Dr. Robotnik) y con unos secundarios que transmiten ternura (James Marsden y Tika Sumpter). En esta ocasión, domina la función un trío de personajes digitales, todos ellos con alma de videojuego: Sonic, el erizo de SEGA (Ben Schwartz), Tails (Colleen O’Shaughnessey) y Knuckles el equidna (Idris Elba).

Los efectos visuales están a la altura de estos tiempos, y el humor, sin un solo punto de malicia, va del slapstick (la especialidad de Carrey) a la comedia de situación (una boda en Hawái y el papel de Natasha Rothwell se prestan a ello). Todo bien dosificado, con buen ritmo y amenidad, dentro del código aventurero que más le conviene a la película.

Esa competencia narrativa ‒no hace falta decirlo‒ consigue que un producto evidentemente comercial funcione con ligereza y además transmita encanto, pero sin agraviar a los espectadores con la pirotecnia visual (cámara temblorosa, montaje epiléptico) a la que nos tiene acostumbrados cierto cine de acción.

Jeff Fowler, tal vez lo sepan ya, ha demostrado con su breve filmografía que domina los resortes del cine de animación. Creo que está llamado a dirigir productos más ambiciosos, aunque de momento aún siga siendo una promesa. Los artesanos como él, con una trayectoria eminentemente técnica, muchas veces acaban acelerando el paso y ganando méritos en el escalafón de Hollywood. Sonic 2: La película es otro punto a su favor.

Sinopsis

El erizo azul ha vuelto para pasar al siguiente nivel y correr toda una aventura en Sonic 2: La película. Después de establecerse en Green Hills, Sonic se muere por demostrar que tiene madera de auténtico héroe. La prueba de fuego llega con el retorno del malvado Robotnik, en esta ocasión con un nuevo compinche, Knuckles, en busca de una esmeralda que tiene el poder de destruir civilizaciones. Sonic forma equipo con su propio compañero de fatigas, Tails, y juntos se lanzan a una aventura que les llevará por todo el mundo en busca de la preciada piedra para evitar que caiga en manos equivocadas.

Copyright del artículo © Guzmán Urrero. Reservados todos los derechos.

Copyright de imágenes y sinopsis © Paramount Pictures. Reservados todos los derechos.

Guzmán Urrero

Colaborador de la sección cultural de 'The Objective'. Escribió de forma habitual en 'La Lectura', revista cultural de 'El Mundo'. Tras una etapa profesional en la Agencia EFE, se convirtió en colaborador de las páginas de cultura del diario 'ABC' y de revistas como "Cuadernos Hispanoamericanos", "Álbum Letras-Artes" y "Scherzo".
Como colaborador honorífico de la Universidad Complutense de Madrid, se ocupó del diseño de recursos educativos, una actividad que también realizó en instituciones como el Centro Nacional de Información y Comunicación Educativa (Ministerio de Educación, Cultura y Deporte).
Asimismo, accedió al sector tecnológico como autor en las enciclopedias de Micronet y Microsoft, al tiempo que emprendía una larga trayectoria en el Instituto Cervantes, preparando exposiciones digitales y numerosos proyectos de divulgación sobre temas literarios y artísticos. Ha trabajado en el sector editorial y es autor de trece libros (en papel) sobre arte y cultura audiovisual.