Vicente DíazLa protagonista suele ser una chica guapa, pero no espectacular, para que las lectoras/espectadoras se puedan identificar. Una chica más bien normal cuyo amor es disputado por un chico sensible y un mozo sexy. Además, la heroína siempre encabeza una rebelión contra un sistema opresor formado por adultos de la edad de sus padres.
Todo esto se introduce en un contexto construido con clichés de la ciencia–ficción distópica, con un subtexto de denuncia obvio, y ya tiene usted una saga literaria–cinematográfica al gusto de la generación millennial.
En principio, esta fórmula (Los juegos del hambre, Divergente, esta Quinta ola…) no tiene nada de malo. De hecho, continúa la ya larga tradición de ficción “para jóvenes adultos” de toda la vida. El problema es la falta de energía y entusiasmo con la que están hechos estos productos.
Las películas derivadas de este concepto ‒no puedo hablar sobre las novelas en las que se basan‒ son muy aburridas. Sus personajes son insípidos y les falta chispa juvenil. La acción es pobre y televisiva. La realización, la fotografía, la música… todo es desangelado y mecánico.
Es cierto que parte de su éxito económico reside en unos presupuestos no necesariamente astronómicos, pero muy bien rentabilizados en taquilla gracias a las hordas de fans de las distintas franquicias. En todo caso, no hay esfuerzo por parte de los cineastas para mostrar nada medianamente espectacular o inspirado. Se trata de tener la versión en imágenes de las novelas, sin más pretensiones.
La nueva entrega de esta fórmula, La quinta ola (¿no debería ser oleada?), se inspira en un popular libro de Rick Yancey. El film retrata una exitosa (de momento) invasión de alienígenas con aspecto humano, quienes están lanzando una serie de plagas bíblicas para quitarnos del medio, sin cargarse el entorno en exceso.
A pesar de unos escasos minutos dedicados a la destrucción, con el consiguiente despliegue de efectos especiales, la película no se entretiene mucho con la acción, sino que nos narra la historia de una chavala superviviente, Cassie (Chloë Grace Moretz), y de unos jóvenes reclutados por el ejército para luchar como niños–soldados contra los invasores.
La historia propone algunas ideas que, pese a no tener nada de novedosas, podrían haber resultado más interesantes si los responsables de La quinta ola hubiesen mostrado el mínimo de empeño. En cierto modo, el film retoma el espíritu de la ciencia–ficción paranoica de los años 50, pero dándole una intención política, antimilitarista, con algún que otro sutil (quizá involuntario) apunte sobre la generación millennial.
Pese a que la mayoría de los espectadores potenciales de esta película ha vivido en un mundo sin Torres Gemelas, y llevaba pañales durante la presidencia de George W. Bush, algunos siguen empeñados en no abandonar el cine post 11–S. Algo similar pasó en su momento con las películas sobre Vietnam, que empezaron siendo potentes obras de denuncia y catarsis y acabaron convirtiéndose en parodias involuntarias (la saga Desaparecido en combate) o conscientes (la rana yonqui de Meet the Feebles).
En resumen, al igual que sucede con otras sagas juveniles del mismo corte, La quinta ola está casi reservada al disfrute de quienes admiran el libro original. El resto de los humanos corren peligro de caer en un estado de intenso sopor.
Sinopsis
En La quinta ola, cuatro oleadas sucesivas de ataques cada vez más mortíferos han dejado la mayor parte de la Tierra diezmada. En una atmósfera de miedo y desconfianza, Cassie (Chloë Grace Moretz) se encuentra huyendo, tratando desesperadamente de salvar a su hermano pequeño. Mientras se prepara para la inevitable y letal quinta ola, Cassie se alía con un joven que podría convertirse en su única esperanza… si tan solo pudiera confiar en él.
«Cassie Sullivan es una gran heroína, pero ella nunca se describiría así. Diría que es simplemente una chica que ha perdido a su hermano y hará lo que haga falta para volver con él», explica Chloë Grace Moretz, que interpreta el papel principal de Cassie Sullivan en esta adaptación de Columbia Pictures de la novela superventas de Rick Yancey La 5ª ola, primer libro de una trilogía.
El libro de Yancey se publicó en 2013 con gran éxito de crítica y público, y pasó más de 20 semanas en la lista de superventas del New York Times. El segundo libro de la trilogía, El mar infinito, recibió una acogida similar, en cuanto a elogios y éxito, mientras que el tercer libro, La última estrella, se publicará en mayo de 2016.
En la historia, nuestro planeta es atacado de formas muy realistas –terremotos, pulsos electromagnéticos, enfermedades– que se asemejan a los miedos muy reales que muchos afrontamos cada día. En ese sentido, el equipo de producción del proyecto abordó La quinta ola con la idea de presentar no un mundo distópico futuro imaginario, sino más bien un mundo realista en el que el espectador se pueda sentir inmerso. «Me gusta la ciencia ficción, porque te permite explorar temas interesantes lateralmente, en lugar de tener que hacerlo de frente», sostiene J Blakeson, que dirige el filme. «Puedes crear un gran concepto de ciencia ficción, como una invasión alienígena, y utilizarlo para contar una historia sobre las emociones y los problemas de la vida cotidiana de una forma más interesante».
«Cuesta soltar el libro una vez que empiezas a leerlo», opina Tobey Maguire, que produce la película junto a Graham King, Matthew Plouffe y Lynn Harris. «Rick tiene una forma de escribir maravillosamente cinematográfica y ha logrado crear una versión de la invasión alienígena que parece tocar todos los esquemas clásicos de la ciencia ficción, sin resultar demasiado fantasiosa, de una forma que no se había visto nunca en la gran pantalla. La idea de que la invasión se produjera en oleadas a fin de desmantelar la civilización me pareció al mismo tiempo original y algo con lo que todo el mundo se podía identificar. La pérdida de la electricidad, las enfermedades, los terremotos, los tsunamis… son miedos que forman parte de la vida moderna en estos momentos. Eso la distingue de inmediato de muchas otras obras de ciencia ficción fantástica».
El productor Graham King considera que, aunque los elementos más emocionantes de la película son los que servirán para atraer inicialmente a los espectadores, es el corazón de la misma lo que realmente los atrapará. «Tiene un elemento de invasión alienígena, tiene un elemento de peligro a medida que van tomando el planeta, pero la esencia del filme es realmente la separación de una familia y cómo consiguen volver a reunirse», explica.
«La historia posee todos esos elementos increíbles, pero lo que para mí la distinguía realmente era que estaba ambientada en una realidad fácilmente comprensible con una protagonista a la que todos conocemos», apunta Plouffe. «Al principio de la historia, nuestra heroína, Cassie Sullivan, es la chica que se sienta a tu lado en clase y vive en un pueblo cualquiera de Estados Unidos».
«No tiene ni la más mínima preparación», agrega Moretz. «Cassie es una chica normal que va al instituto y no tiene conocimientos previos de supervivencia. No tiene habilidades de girl scout ni fuerza de superhéroe. Es como yo. Cuando llega la primera ola, su reacción resulta perfectamente real. Eso es lo que hizo que me interesara interpretar a Cassie. Me sentí muy cercana a ella».
Una de las razones de la popularidad del libro es la forma que tiene de pasar de la ficción juvenil a la ficción adulta, y de la ciencia ficción a la ficción general. El autor de la obra, Rick Yancey, señala que el libro se centra en temas universales que todos tenemos que afrontar. «Todos mis libros, no solo La 5ª ola, tratan sobre aquello que nos hace humanos», comenta Yancey. «Lo que verdaderamente me atraía de esta historia era que, cuando te lo quitan todo, ¿qué es lo que nos queda? ¿Qué es lo más importante? En el siglo XXI, nos rodeamos de tantos accesorios, con tanta tecnología, que nos aleja otro paso más de la conexión humana. En La 5ª ola, nos quitan todas esas cosas y cada personaje lo afronta a su manera, ¿cómo me enfrento a este nuevo mundo? ¿Cuáles son las cosas que verdaderamente importan? ¿Qué estoy dispuesto a sacrificar para tener todas esas cosas? Además, es un thriller, una historia de supervivencia, una historia de gente que intenta prevalecer, aunque ello sea prácticamente imposible, y también es una historia de amor, sobre el amor en todas sus variantes».
Plouffe sostiene que supo desde la primera página que La 5ª ola no iba a ser otra típica historia de invasiones alienígenas. Tras haber colaborado recientemente con los productores de La quinta ola Tobey Maguire y Matthew Plouffe encarnando a Boris Spassky frente a Maguire como Bobby Fischer en el filme Pawn Sacrifice, el alabado actor Liev Schreiber encarna el papel del coronel Vosch.
«Liev es uno de los mejores actores en activo en la actualidad», afirma Plouffe. «Cuando Tobey y yo leímos el libro, nos dijimos bromeando: ‘Me pregunto si podríamos conseguir que Liev interpretara a Vosch’. Nos quedamos encantados cuando aceptó, porque es el ideal».
«Cuando aparece, viene a ser lo que todo el mundo estaba buscando. La gente ha estado luchando por sobrevivir», señala Schreiber. «En tiempos de crisis, siempre esperamos contar con la ayuda de los miembros de nuestras fuerzas armadas y, cuando aparece Vosch, la gente se siente como si hubiera llegado la caballería. Pero Vosch es un tipo interesante y la cosa se vuelve un poco más complicada».
Maria Bello encarna a la sargento Reznik, la dura segunda al mando de Vosch. «La particular forma de Maria de interpretar a Reznik es opuesta a la forma tan sobria en la que Liev interpretó a Vosch», señala Harris. «Es un personaje desmesurado, y la forma de abordarlo de Maria encajaba exactamente con lo que J quería que fuera Reznik. Aporta un toque de diversión en mitad de la película, J quería que todos le tuvieran miedo, y Maria creó un personaje muy intimidante. ¡Seguro que le dio un miedo de cuidado al pobre Zack!».
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Guzmán Urrero
