Las habilidades de Arsenio Lupin, el ladrón de guante blanco creado por Maurice Leblanc, se relacionan en sus orígenes con el mundo de la prestidigitación.
Maupassant, en sus «Confesiones » (El anillo de bodas), explica así su habilidad para el escamoteo: «Chico, trabajé seis meses con Pickman».
De Alberti Pickman (1857-1925), el mago y mentalista belga, relata Maupassant una sesión de magia en sus «Crónicas» (En los baños de mar) que tuvo lugar en Etretat, en la costa del Pays de Caux. Cuando Maupassant descubrió la hipnosis a través de Pickman, creyó hallarse ante uno de los secretos más profundos de la naturaleza e inició esa encarnizada persecución de lo invisible que le conduciría a escribir El Horla, personaje que encarna al ser invisible y temido.
«¿Qué es lo que tengo? Es el Horla que me hechiza, que me hace pensar esas locuras. Está en mí, se convierte en mi alma. ¡Lo mataré»
Podéis encontrar El Horla de Maupassant en el buscador de Google. Una buena lectura para el fin de semana.
En la imagen, cartel de Pickmann ejecutando la ilusión creada por Buatier de Kolta, conocida como el «Escamoteo de una dama».
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