Vicente DíazEsta película se apoya en dos peculiaridades: la inmensa cantidad de sangre que se vierte y un cambio de género más o menos sorprendente, en torno al punto medio del metraje. Para los surcoreanos y los aficionados al K-pop el atractivo reside en la presencia de bellas estrellas de la escena musical de aquel país. Son figuras que los ancianos no conocemos, pero no es cuestión de deprimirse.
La historia es sencillísima y podría ser la base de cualquier película de videoclub de los 90: la policía traslada en un carguero un cargamento de peligrosos criminales, deportados desde Filipinas a Corea del Sur. Por supuesto, los malos tienen un plan para tomar la nave, pero hay algo más… En ese algo más reside la sorpresa de la cinta y el cambio de género, así que puede usted dejar de leer en este mismo párrafo.
Sin dar demasiados detalles, el film pasa de ser un Con Air marítimo a una combinación entre Viernes 13 y Soldado Universal. Como en el barco Demeter de la novela Drácula, el carguero de Project Wolf Hunting también lleva un pasajero en sus entrañas con ganas de viajar solo, así que lo que parecía que iba a ser un thriller pasa a ser una aventura de ciencia ficción, terror y acción.
Kim Hong-sun, director con querencia a los thrillers en espacios cerrados, se lanza aquí voluntariamente al delirio violento. Lo hace sin atisbo de realismo, con ¿cientos? de muertes de personajes con la presión arterial por las nubes. O eso parece al comprobar cómo de cualquier herida, en cualquier parte del cuerpo, brota un géiser de sangre, como en las películas de samuráis de los 70.
Pese a la calidad de la producción, con el buen aspecto habitual de las películas y series surcoreanas, el sibarita de la ultraviolencia lúdica se encontrará aquí con un caso de cantidad por encima de la calidad. Y es que las secuencias de acción no lucen todo lo que deberían por un montaje con exceso de cortes. Por su parte, las numerosas muertes no son demasiado creativas (casi exclusivamente, se trata de cuellos apuñalados y cabezas descalabradas).
Al espectador casual todo ello le parecerá una brutalidad, pero a los morbosos como el que escribe estas líneas Project Wolf Hunting les parecerá un pelín desangelada si se compara con títulos recientes de acción bruta, como The Night Comes for Us o cintas de gore desatado como las de las sagas Hatchet o Terrifier, repletas de salvajadas mucho más elaboradas. Project Wolf Hunting entretiene como manga de imagen real para adolescentes, y posiblemente, levante la ceja del espectador adulto que espere ver uno de esos sólidos policíacos de acción procedentes de Corea del Sur.
Sinopsis
Un grupo de peligrosos delincuentes coreanos tiene que ser trasladado en un buque de carga de Manila a Busán. Los acompañan a bordo el capitán de la policía coreana y otros 22 detectives experimentados. Pronto, la prisión flotante abandona el puerto y comienza su camino hacia Corea. Los prisioneros están fuertemente custodiados y todo está tranquilo a bordo hasta que los criminales inician un motín.
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