Los guanches resistieron la llegada de las tropas de Diego de Herrera, a tal punto que llegaron a devastar la fortaleza que éste mandó edificar en 1464. Su derrota en 1499, por parte de Alonso Fernández de Lugo, permitió asentar la población que luego prosperó en el mismo lugar.
Por desgracia, su estratégica posición despertó la codicia de piratas e invasores. En 1822 una decisión gubernativa convirtió a Santa Cruz en capital de la isla de Tenerife. Desde 1927, fue considerada capital de la provincia occidental (Tenerife, La Palma, La Gomera y el Hierro).
Su crecimiento económico, a lo largo del siglo XX, debe mucho al comercio y al turismo. Para fomentar esta última actividad, en 1974 las autoridades remodelaron lugares como la playa de las Teresitas, enriquecida con varias toneladas de arena del Sáhara.
Con la llegada de la democracia y de la España autonómica, la ciudad se convirtió en capital de las Canarias, una distinción que asimismo corresponde a Las Palmas de Gran Canaria.
Qué ver en Santa Cruz de Tenerife
La ciudad exhibe un patrimonio monumental excelente, a través del cual podemos entender mejor las circunstancias de su pasado. La iglesia de la Concepción (1502-1652) y la iglesia de San Francisco, antiguo templo del monasterio de San Pedro de Alcántara (1680), fueron mejoradas en su estructura y ornamentación a lo largo del siglo XVIII. A este último periodo corresponden el casino, el palacio de la Carta y el monumento a la Virgen de la Candelaria (1778), obra del escultor Casanova.
El Teatro Guimerá, inaugurado el 25 de julio de 1851, nos traslada a lo que fue la vida cultural tinerfeña en el XIX.
Entre los edificios modernos, destaca el Auditorio de Tenerife Adán Martín: obra del arquitecto español Santiago Calatrava.
Fiestas
Por su colorido y su puesta en escena popular, los carnavales tinerfeños (febrero – marzo) atraen una masiva atención. No obstante, hay otras festividades considerables: la fiesta de la Fundación de la Ciudad (3 de mayo), la fiesta marinera de la Virgen del Carmen (16 de julio), la efeméride de la victoria sobre Nelson, o conmemoración de la defensa de la ciudad (25 de julio) y las fiestas de la patrona de Canarias, la Virgen de la Candelaria (15 de agosto).
Qué comer en Santa Cruz de Tenerife
El banquete de los tinerfeños está presidido por las bebidas autóctonas: los caldos de Malvasía y TacoronteAcentejo, el ron y el ron-miel. Las recetas habituales son el caldo de pescado, el conejo en salmorejo picante, el sancocho, el gofio, salsas como el mojo verde o mojo picón y las papas arrugadas. Conviene al paladar de los más golosos probar las delicias de la repostería local: el bienmesabe, los bizcochos lustrados, el frangollo, las tirijalas y el turrón de gofio.
Excursiones
Barranco de Fasnia y Güimar.
Barranco del Infierno.
Costa de Acentejo.
Las Palomas.
Montaña de Guaza.
Montes de Anaga.
Parque Nacional de Las Cañadas del Teide.
Parque Natural de Corona Forestal.
Visitas en los alrededores
La Laguna.
Los Cristianos.
Puerto de la Cruz.
Parque Marítimo César Manrique.
Icod de los Vinos.
Candelaria.
Playa de las Américas-Adeje.
Monumentos y museos
Plaza de España.
Iglesia de la Concepción.
Iglesia de San Francisco.
Museo Arqueológico.
Museo de Bellas Artes.
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Imagen superior: Wikimedia Commons.
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