Vicente DíazFantasía, Los tres caballeros o incluso Aladdin demostraron que la compañía Disney, pese a su poderío comercial, también gozaba de una faceta atrevida y experimental y era capaz de salirse de lo que se esperaba de ella: en el caso de las dos primeras películas, por su locura estética y conceptual, en el caso de Aladdin, por su apuesta por el humor frenético.
Con el colchón financiero que supone poseer los derechos no sólo de sus personajes tradicionales, sino también de los de Pixar, Marvel o La Guerra de las Galaxias, uno desearía que Disney apostara por la sorpresa en una de sus películas animadas anuales (hechas por ordenador con cierto «espíritu visual» heredero de su animación clásica).
Big Hero 6, en principio, tenía todas las papeletas para innovar: historia de ciencia–ficción, referencias estéticas al manga y mucha tecnología punta, tanto en el argumento como en las herramientas cinematográficas.
Con la colaboración del estudio Man of Action, que triunfa en el medio televisivo con series como Ben 10, se esperaría un film infantil de acción con un ojo puesto en el futuro, cercano a las más deslumbrantes propuestas audiovisuales de los videojuegos –que, hoy por hoy, conforman una gran parte del ocio y la educación cultural de las nuevas generaciones–. Uno sospecha que las intenciones iniciales iban por esos derroteros, pero lo que se nos ofrece finalmente es un film de superhéroes bastante estándar y no muy diferente de otros productos más o menos recientes como Los Increíbles o Megamind.
Técnicamente impecable, el largometraje comienza como una historia sobre jóvenes superdotados y robótica, situado en la imposible ciudad de San Fransokyo. Big Hero 6 combina el típico relato de amistad entre un chaval y un robot (sin el poderío de El gigante de hierro) con la enésima narración del origen de un grupo de superhéroes. Mucha acción, moralina sobre lo mala que es la venganza y sobre lo bueno que es aprovechar el talento y gags cómicos se suceden en una película que no entra mal por los ojos pero que huele a refrito por todos lados.
Un par de guiños a los amantes de los cómics sobre la adquisición de Marvel por parte de Disney no son suficientes para despertar el interés más allá del diseño del robot médico Baymax, algo así como un Concrete hinchable, encantador y diseñado para venderse en forma de muñeco.
Sinopsis
Big Hero 6 es una comedia de aventuras que narra la historia de Hiro Hamada (voz de Ryan Potter), un prodigio de la robótica que aprende a hacer buen uso de su genialidad gracias a su brillante hermano Tadashi (voz de Daniel Henney) y a sus amigos: Go Go Tomago (voz de Jamie Chung), una adicta a la adrenalina, Wasabi (voz de Damon Wayans Jr.), un obseso de la precisión, Honey Lemon (voz de Génesis Rodríguez), un genio de la química y Fred (voz de T.J. Miller). Cuando una serie de devastadores acontecimientos los catapulta a una peligrosa trama que se desarrolla en las calles de San Fransokyo, Hiro recurre a su mejor amigo, un robot llamado Baymax, y transforma al grupo en un equipo de héroes supertecnológicos dispuestos a resolver el misterio.
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Guzmán Urrero
